Analistas políticos locales destacan que un aumento de los votos nulos o blancos puede ser uno de los efectos de la apatía electoral o desinterés ciudadano, respecto de la elección del Consejo Constitucional, el próximo 7 de mayo.
“Considerando la cantidad de elecciones que hemos tenido en los últimos dos años, una nueva elección de los consejeros y consejeras constitucionales puede generar una serie de problemas. Uno, electoral o muchos votantes no se informan y votan por una lista basados no en conocimientos, sino que en otras razones. Dos, puede generar que las personas busquen la manera de excusarse y seguramente va a bajar la participación electoral a pesar que es un voto obligatorio. Los votantes pueden estar lejos, la gente no va a viajar, etc. Tercero, puede ser que la gente salga a votar pero que aumente la cantidad de votos nulos o en blanco, porque no hay interés de hacer algo más”, dijo Jeanne Simon, académica e investigadora de Creasur UdeC.
Respecto de la existencia de voto obligatorio, Simon afirmó que implica que vamos a tener mejores tasas de participación en comparación a cuando era voto voluntario, porque muchas personas deben ir a votar. “El tema de la apatía electoral hace que sea mucho más impredecible cómo van a votar, más de la mitad del padrón electoral no tiene una identidad partidista o política definida. Eso hace mucho más inestable el voto y mucho más difícil predecir quien puede ganar, especialmente considerando el tema de las listas”, dijo Simon y agregó que “estamos en momentos donde es difícil predecir los resultados que tiene que ver con una desconexión entre los partidos y el electorado. Como es una votación de lista, esta se basa justamente en la capacidad de movilización que tienen los partidos para que salgan a votar por sus candidatos y también podría favorecer que figuras más conocidas en los medios puedan tener mayor posibilidad.
Medición política
Por su parte, Francisco Gatica, analista político del Observatorio de Corbiobío, dijo que la existencia del voto obligatorio para la elección del Consejo Constitucional permitirá contar con una interesante medición de las inclinaciones políticas de los chilenos y chilenas.
“Hasta el momento las elecciones de autoridades (presidente, senadores, diputados, gobernador y alcaldes) fueron realizadas con la modalidad de voto voluntario; por lo tanto no se podía dimensionar la inclinación política del universo de electores que no se sentían motivados a ir a votar”, dijo.
En este sentido, agregó Gatica, la votación obligatoria del año pasado permitió visualizar una tendencia, “la que por la naturaleza de la decisión, es imperfecta para realizar extrapolaciones políticas de mejor calidad. Finalmente resulta preocupante el desconocimiento de la ciudadanía de la votación que tendremos en mayo. La falta de información sobre los candidatos puede aumentar el porcentaje de votos blancos y nulos, que habitualmente han sido bajos. También el desconocimiento en la importancia del nuevo proceso constitucional puede aumentar las excusas para no ir a votar a partir de lo indica la ley electoral”.
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