Trabajadora social desapareció hace 18 días en San Carlos

Preocupados se encuentran los familiares y amigos de María José Ramírez Muñoz, una joven sancarlina, de 34 años, quien desapareció el sábado 23 de marzo en el sector Llahuimavida de la comuna.

La trabajadora social fue vista por última esa noche, tras subir a una camioneta con destino desconocido, imagen que quedó registrada en una cámara de seguridad del sector que muestra al vehículo transitar en dirección a la Variante San Agustín.

Para sus cercanos es extraño que la joven madre haya dejado su hogar por largo tiempo, sin establecer contacto con sus dos hijos y madre, quien le ayudaba en el cuidado de ellos. La sancarlina trabaja para Coaniquem y en el pasado estuvo ejerciendo su profesión en establecimientos educacionales.

Keiny Sepúlveda, amiga y vocera de la familia, relató las circunstancias en que se pierde el rastro a María José, quien esa noche salió solo con su teléfono celular y un monedero.

“Ella el viernes (22 de marzo) fue a dejar a su hijo donde su mamá. El sábado se juntó con una amiga con quien estuvo toda la tarde y luego ella sale de su domicilio a las 21 horas de ese día y espera a un vehículo en un paradero que está fuera de su casa. La camioneta se mete en un callejón y María José camina hacia el vehículo y esa fue la última vez que se vio”, señaló.

Según Keiny y familiares, la joven aparentemente no atraviesa por problemas o preocupaciones y mantenía contacto permanente con su madre. No tiene pareja en la actualidad, pero sí mantenía contacto con expololo, a quién le arrendaba una propiedad. Entre sus amigas, es valorada su compañía, porque dicen que es “buena” y “apañadora”.

“Son extrañas las circunstancias, ella no iba a dejar a sus hijos, a lo más un fin de semana porque se iban a quedar con la abuela, pero llegar e irse no. Ella se sube al vehículo por su voluntad, pero claramente fue retenida, porque ella no iba a dejar al hijo, sin volver. A parte que estuvo de cumpleaños la semana pasada”, dijo.

La familia presentó la denuncia por presunta desgracia el domingo 24 de marzo en la Policía de Investigaciones, que ha realizado pericias al respecto.

“El último día que se tuvo contacto con ella fue el sábado 23 como a las 22.20 horas. Su madre recibe un WhatsApp con faltas de ortografía, en el que dice que iba ir a la plaza y que mañana iba ir a buscar al hijo. La mamá encontró raro el mensaje, por lo que fue a la casa de la joven con la hermana de esta, como a las 16 horas del domingo, y cuando entraron a la casa el portón estaba abierto con su vehículo adentro. En la casa estaba la televisión y las luces y prendidas, como cuando uno va y vuelve, es decir, ella asumía que no se iba a demorar. La mamá le dejó una nota en la mesa diciendo que se llevó las cosas del colegio del niño para llevarlo el lunes. Después ella no contesta y el domingo fue a presentar la denuncia”, detalló.

La joven tiene tez morena, ojos de color café, mide 1.60 y pesa 72 kilos. Tiene tatuajes en ambos brazos con los nombres de sus hijos., además otro, en el cuello, de la figura de una madre con sus hijos.

Desde su círculo cercano llamaron a quienes tengan antecedentes establecer contacto con la  PDI o al siguiente contacto: +56 9 9942 6657